Julián Arango conquista Panamá
El reconocido actor y comediante colombiano Julián Arango llegó al Teatro Nacional con “NIDEA” para deleitar a los panameños. En medio de aplausos y gritos a las 9:07 p.m se abrió el telón y comenzó un desfile mixto de risas y lágrimas de principio a fin.
NIDEA es un monólogo versátil, ideal para un público con criterio formado repleto de chistes , anécdotas y relatos de su vida privada y profesional, adaptados a un lenguaje fuerte y cotidiano, con el cual el actor cautivó la atención de todos los presentes.
Con un teatro lleno y al ritmo de una “canción para un gordo” que su madre le cantaba, Julián comenzó su monólogo o -“bueno” (muletilla preferida)- su “Stand up Comedy”, donde se refleja la vida del actor desde su niñez hasta la actualidad.
El colombiano mostró sutalento como actor comediante e improvisador y es que no hizo falta un escenario lleno de luces, bailarines y menos un elenco de actores y actrices para disfrutar de un buen espectáculo. Solo bastó con él y un excelente público de acompañamiento para que la obra se desarrollara.
La interacción entre Arango y el público fue la chispa adecuada, durante aproximadamente una hora y media de “show” los asistentes se mostraron abiertos, y creativos. Todos participaban de una misma fiesta en donde el teatro completo se sintió protagonista, en donde el único no invitado fue el silencio.
Transcurrían los minutos y al unísono las risas se incrementaban, tanto, que sacaban de contexto al actor “mija, esa risa fue de burla, así no”, fueron las palabras de Julián al dirigirse a una espectadora.
Momentos Inolvidables.
El actor tuvo su momento cumbre cuando interpretó sus famosos personajes de Hugo Lombardi y El Guadaña, los asistentes coreaban sus frases más conocidas como: “está de ututui”, “re bombi” hasta salió a relucir el “chesito su merced”. Pero este no fue el final, llegó el momento en donde el actor no tenía “Nidea” de lo que haría y a petición del teatro le tocó interpretar, bailar y cantar piezas musicales a ritmo de vallenato y tango, al cual titularon por elección popular “te amo calvo”, y sin bastar con esto, improvisó un pequeño guion junto a dos espectadores donde salieron a relucir personajes de cómicas y películas hasta de la política panameña como el exalcade Bosco Vallarino, Superman, la ballena Willy y Batman.
Arango todavía seguía sin idea de lo que estaba haciendo y el teatro entero no sabía de qué se reía, pero todos los presenten tenían claro que no querían que la obra acabara, pero como todo tiene su final, y toda arte escénica tiene algo que decir o hacer ver, el actor mostró y dio un claro mensaje de que las personas no deben dejarse influenciar por otras y muchos menos dejar que tomen las decisiones por uno.
Definitivamente “NIDEA” impregnó de emociones el Teatro Nacional. Julián Arango se despidió con una sonrisa y manifestó que se siente feliz de estar en Panamá y agradeció a todos los asistentes su recibimiento. Y no se fue sin asegurar que no tiene “NIDEA” de cuando regrese a suelo canalero.
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