Países de la Unión Europea recortan presupuesto para 2016
Los países han pactado para el próximo ejercicio presupuestario unos compromisos de 153.270 millones de euros y unos pagos de 142.120 millones de euros.
Países de la Unión Europea recortan presupuesto para 2016
Los países de la UE adoptaron hoy su postura con respecto al presupuestario de 2016 con unos compromisos y pagos menores que los propuestos por la Comisión Europea, pero que consideran realistas para financiar áreas prioritarias como el crecimiento, la creación de empleo y los flujos migratorios.
La posición del Consejo de la UE es la base para iniciar las negociaciones con el Parlamento Europeo (PE), el cual decidirá a finales de octubre si adopta enmiendas a la misma.
En ese caso se iniciará un periodo de mediación de tres semanas, que comenzará el 29 de octubre con el propósito de aprobar las cuentas comunitarias hasta el 18 de noviembre.
Los países han pactado para el próximo ejercicio presupuestario unos compromisos de 153.270 millones de euros y unos pagos de 142.120 millones de euros.
Los compromisos son el importe máximo de pagos futuros a los que se puede comprometer la UE en un periodo presupuestario.
Frente a la posición de los países, la Comisión Europea (CE) propuso en mayo unos compromisos de 153.529 millones de euros (un 5,2 % menos que el año anterior) y unos pagos de 143.541 millones, lo que supone un aumento del 1,6 %.
De esta manera, como suele ocurrir cada año, los países miembros han optado por reducir los montos propuestos por el Ejecutivo comunitario.
En concreto, prevén una disminución de 563,6 millones de euros en compromisos y de 1.400 millones en pagos.
En opinión de los países, ello demuestra que el Consejo quiere evitar "cargas innecesarias para los presupuestos nacionales de los Estados miembros en un momento de consolidación fiscal".
Sin embargo, alegan, la UE tendrá "suficiente margen dentro del presupuesto para reaccionar a acontecimientos y necesidades no previstas".
Las áreas que más incrementos en pagos experimentan en comparación con el año pasado son las partidas de política exterior (un 22,4 % más), seguridad y ciudadanía, incluyendo la inmigración (un 15,4 % más), así como investigación y otras medidas encaminadas a aumentar la competitividad (un 8,6 % más).