Ordenan a tres sacerdotes y un diácono en la Catedral de Santiago
Los sacerdotes ordenados fueron Milciades Enrique Gaitán, Cristian Pineda Gutiérrez y Aquilino Fábrega.
Sacerdotes y diácono ordenados. Foto: Melquiades Vásquez
En una solemne ceremonia celebrada en la Catedral de Santiago, tres sacerdotes y un diácono fueron ordenados durante un acto presidido por el obispo de la diócesis de Veraguas, Monseñor Audilio Aguilar.
La liturgia, cargada de simbolismo y tradición, reunió a familiares, feligreses y representantes de diversas comunidades parroquiales que acudieron para acompañar a los nuevos servidores de la Iglesia.
Los sacerdotes ordenados fueron Milciades Enrique Gaitán, Cristian Pineda Gutiérrez y Aquilino Fábrega, mientras que un joven candidato recibió la orden del diaconado.
Durante la ceremonia, Monseñor Aguilar destacó la importancia de fortalecer la misión evangelizadora en tiempos en que la sociedad “necesita orientación espiritual y valores que guíen su caminar”.
Al ser abordado por los medios, el obispo expresó con visible alegría que la llegada de nuevos servidores representa un motivo de esperanza para la comunidad católica.
“Para todos es una alegría cuando se cuenta con hombres dispuestos a servir a Dios, especialmente ahora que vivimos en una sociedad que debe ser orientada hacia la mano del Señor”, señaló.
Por su parte, el recién ordenado sacerdote Cristian Pineda Gutiérrez subrayó la necesidad de promover la vocación religiosa entre la juventud. “Es importante cultivar en los jóvenes el llamado al servicio, para formar nuevos diáconos y sacerdotes que aporten en la educación y orientación de la sociedad y de las futuras generaciones”, afirmó.
Los nuevos sacerdotes hicieron un llamado a los jóvenes con inquietud vocacional a acercarse a la Iglesia y buscar caminos de formación que les permitan servir tanto a la comunidad católica como a la sociedad en general. Coincidieron en que la labor pastoral requiere entrega, preparación y un profundo compromiso espiritual.
La diócesis de Veraguas celebra estas nuevas ordenaciones como un impulso para la continuidad del trabajo pastoral en las distintas parroquias de la provincia.