Migrantes deportados por EE.UU. a Panamá reciben extensión de permiso humanitario
Este nuevo permiso les permite permanecer legalmente en territorio panameño mientras gestionan opciones para continuar su tránsito.
Este nuevo permiso les permite permanecer legalmente en territorio panameño mientras gestionan opciones para continuar su tránsito.
Las palabras de Trump llegan en un momento en que los tribunales siguen bloqueando las medidas más controvertidas en materia migratoria.
En lo que va del año, han atravesado el Darién 2,904 migrantes.
Según las autoridades, las principales causas de deportación fueron: evasión de los puestos de control, estadía vencida y permanencia irregular.
EE.UU. está manteniendo contactos con una treintena de países para que acepten recibir "miles" de personas expulsadas.
La Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) de Costa Rica explicó que los casos de estos solicitantes se encuentran 'en proceso de valoración'.
Los 111 inmigrantes son de una decena de países distintos, pero dominan los de Irán (24), Camerún (21), China (12), Nepal (10) y Afganistán (9).
Hasta 200 dólares pagan los migrantes por ser trasladados desde Panamá hasta Colombia en lanchas.
Al grupo lo alojaron primero en un céntrico hotel y a los que rechazaron ser repatriados a sus países de origen los trasladaron a un albergue.
La ciudadana china presuntamente recibió colaboración externa de individuos que se encontraban merodeando alrededor del hotel.
Los migrantes se alojarán temporalmente en un hotel de la localidad y de ahí se mueven a una especie de albergue en San Vicente.
Ambos países cortaron relaciones diplomáticas en 2019.
El diplomático estadounidense manifestó que la migración masiva es muy lamentable y una tragedia.
El Gobierno dispuso esos aviones para llevar de regreso a casa a 110 connacionales deportados desde Estados Unidos para un retorno digno.
En estos viajes, se repatriaron a 50 ciudadanos colombianos, 17 venezolanos, 15 nicaragüenses y 51 migrantes provenientes de otras naciones.
El gobierno colombiano aceptó a recibir a sus ciudadanos que provengan deportados de Estados Unidos, con lo que se evita sanciones de la potencia.
El nuevo Gobierno planea una "redada migratoria a gran escala" en Chicago, con el despliegue de entre 100 y 200 agentes.
Los conocidos como POGO se convirtieron tras ocho años de actividad en sinónimos de estafas, esclavitud y tráfico humano.