Hagamos una porno

Con muchas expectativas por la gran publicidad que se vio en la red de la comedia Hagamos una porno (Zack and Miri Make a Porn) decidí ver la película y hace bastante tiempo que no terminaba de ver en su totalidad un film, la última vez que me había pasado lo mismo fue con la porquería de Australia de Nicole Kidman, tal es así que tuve que sacarla.

Los actores Seth Rogen (Zack) y Elizabeth Banks (Miri) se enfrentan a tiempos difíciles y a una montaña de deudas.

Cuando se les corta el suministro de electricidad y agua, comienzan a darle vueltas a la idea de realizar una película pornográfica casera para hacerse con unos ingresos rápidos, requiriendo la ayuda de los amigos para la empresa.

Ambos juran que su amistad no se verá arruinada por mantener relaciones sexuales.

La película es aburrida, lo único que se puede ver es su lenguaje sexual, con muchos chistes muy americanos, y a lo que se refiere lo sexual no despierta la mirada de nadie, y lógicamente no te deja sacar una sola sonrisa.

Desde aquí no la recomiendo para nada, pudo ser una gran comedia, pero creo que el director le erró a todo, salvo a la actuación de Justin Long (Duro de matar 4) impecable como siempre.