dia-d
El marcomo útero, lecho y cobija
Yessika Valdés - Publicado:
La niñez, el agua, el sueño, la fauna marina como compañera, adorno y complemento son protagonistas clave en lo que es un canto pletórico de colorido, a la vida como tesoro, privilegio y oportunidad y que constituye la más reciente propuesta artística de Lucio Cansuet, cuyo nombre artístico es Kansuet.El mismo día que inauguró se vendieron un número significativo de cuadros.“Entre dos aguas” se titula la muestra, y Allegro gestionó esta nueva oportunidad para mostrar el talento de este gran artista cuyo arte promueve.Esta vez, el escenario es la Galería de Artes Visuales “Juan Manuel Cedeño”, del Instituto Nacional de Cultura, INAC, en Las Bóvedas.Peces voladores, niños que flotan en las aguas marinas, niños en capullos, bosques que se mecen en hamacas y hasta una hamaca real, con seis hermosos caracoles, colgada en una esquina de una de las dos salas de la galería donde cientos de personas ya han ido a admirar los bellos cuadros (óleo, técnica mixta/lienzo, acuarela y carboncillo/papel), alrededor de 15, del hijo de Urbabip y Luis Alberto Cansuet, quien hace 36 años nació en Cartí-Yantupu, con una misión: ser artista y a través de su bello arte hacer que todas las miradas se vuelvan hacia su nativa Comarca Kuna Yala.Kansuet dedica entre cinco y ocho horas diarias a pintar.Desde que descubrió ese don, en la adolescencia, empezó a cultivarlo.Sus temas están siempre relacionados con los kunas y sus tradiciones, su folclor, la cotidianidad.Inició pintando cuadros en miniatura.Ahora, prevalecen los de formato mediano y grande.Calcula que ha pintado, a razón de unos 100 al año, más de cinco mil (5000).Obras suyas han sido adquiridas tanto en Panamá como por coleccionistas de Estados Unidos, Martinica y Francia.Kansuet es un hombre sencillo, pero que se goza de sus logros, sin por ello pecar de inmodesto.Se considera afortunado de que su arte se venda bien y guste, pero atribuye eso a la dedicación y amor que pone en cada trazo, en cada pincelada….“Creo que uno al pintar debe pintar con amor.Tratar de pintar algo bueno.Algo que le llegue al espíritu”.Desde que su pequeña hija Alison tenía dos años, hasta ahora que tiene ocho, es su musa.Aunque también aparece un niño, sobrino suyo, en algunos de sus cuadros, como en esta ocasión y precisamente en el que ilustra la portada del catálogo de “Entre dos aguas”.Cuando le preguntamos si ella no había demostrado interés por la pintura, Kansuet nos respondió que sí se anima.“Ya ha dado sus pinceladas y muchas veces me sorprenden los dibujos que hace”, dice.Un categórico “sí” fue la respuesta de Lucio Kansuet a la pregunta ¿se puede vivir de la pintura en Panamá? Pero el reconocido pintor kuna hace la salvedad de que cosechar lauros en el arte pictórico demanda “mucho empeño y ser muy insistente”.