‘La revista Lotería jamás desaparecerá’

Lotería, la revista cultural panameña, cuya existencia frisa los 72 años, al parecer tiene más futuro que pasado. Por lo menos así lo ve el historiador Rommel Escarreola, quien es miembro de su consejo editorial y conoce sus secretos como nadie.

Para garantizar esa larga vida, “la enciclopedia del Ser panameño” -como Escarreola la define- de ahora en más la revista de los pensadores y del pensamiento nacional debe apuntar hacia temáticas como la ecología, la educación y, por supuesto, la ciencia y la tecnología, sin que esto implique darle las espaldas a la cultura y al Ser panameño.

En ese sentido, ya se han dado avances con la creación de un sitio en internet donde se pueden ver todas las ediciones de Lotería, y en las ediciones por venir (como la 501) apostará, entre otros temas, por ‘El legado de María Curie’, su vida y sus aportes a la química.

¿Ha ido la evolución de la revista a la misma velocidad que los cambios de distinta índole que se han dado en la sociedad?

Yo pienso que lo que estamos haciendo ahora es adaptando la revista a los avances de la ciencia, de la historia, de la antropología, etc. La segunda edición de este año (marzo-abril 2012) dice: 'Generación de la ciencia y la tecnología'. O sea, la tecnología es una herramienta importante en el desarrollo del conocimiento humano y ese conocimiento sirve para ampliar, no solo la cultura, sino también el desarrollo. Estamos incorporando la revista Lotería en la tecnología y hacia allá vamos.

Se dice que los hábitos de lectura han cambiado, ahora la gente apuesta más por lo breve y directo, ¿cómo queda Lotería en ese contexto?

Los hábitos de la lectura se crean en dos momentos: uno en la escuela y otro en casa. Yo considero que internet ha sido un instrumento, si bien es cierto de la tecnología, pero que te vincula más rápidamente a buscar el conocimiento, por eso, si no tienes una colección de la revista Lotería, ¿qué hemos hecho? No hemos pasado por alto ese momento o desfase, y ahora todas las ediciones de la revista Lotería están en internet. El primer tiraje fue de 4,000 ejemplares. Ahora, a nivel mundial, en China, en Australia o en Europa tienen la oportunidad de conocer la revista Lotería de la década de los 40, sin tener la colección en un librero, y ese es un avance.

¿Diría que la revista Lotería tiene larga vida?

Yo pienso que la revista Lotería jamás desaparecerá. Ha habido tres momentos en los que tuvo su periodo de clausura. Una en la década del 50, con el golpe de Estado a Arnulfo Arias; otro en la década del 60, que no fructificó; y uno a raíz de la invasión, que la revista se dejó de editar por un año. Así que la revista tiene larga vida. ¿Y por qué? Porque los panameños vamos a seguir pensando, los intelectuales van a seguir pensando, aportando sus investigaciones sobre la realidad. Pero hay hecho cierto, la revista Lotería es la enciclopedia del Ser panameño. En ella vas a encontrar arte, literatura, arquitectura, ingeniería, periodismo, historia y toda una gama de conocimientos, todo en función de investigar el Ser panameño.

¿Ha sido difícil que se mantenga alejada de los vaivenes políticos?

Ningún medio de difusión está exento de los vaivenes de la política, pero realmente lo que hay que hacer es el balance entre si queremos producir una revista para la sociedad panameña y producir conocimiento o queremos convertirla en un medio de expresión de determinado partido político, y eso no está pasando.

Usted dice que los 70 fue una buena época, había una causa nacional, ¿le parece que hoy existe algún tema que pudiera motivar a los intelectuales a participar en Lotería?

Mira. En la edición 500 hay un trabajo sobre educación y qué mejor momento para escribir sobre educación. Vamos a sacar temas sobre ecología. Qué momento más importante, no solo para la revista, si- no para la sociedad panameña, que esos temas se incorporen y se estudien seriamente.

¿En qué nivel puede contribuirLotería a que la gente distinga entre el desarrollo económico y el humano?

Mi opinión personal es que se dice que hay un desarrollo económico y un crecimiento económico en Panamá. Algunos plantean que el desarrollo económico no está llegando a las grandes mayorías nacionales, sin embargo, yo considero que existe un desarrollo económico en Panamá. Yo personalmente les estoy haciendo un llamado a los economistas de Panamá para que vengan a escribir a la revista Lotería, que presenten sus teorías sobre el desarrollo económico en Panamá. En la edición 500 hay un trabajo sobre el Metro, hay una explicación de la importancia y su recorrido. Hay espacio para todo.

¿Qué retos inmediatos se le presentan a Lotería?

La revista tiene que avanzar en los temas de tecnología, ciencia e investigación. Son los temas actuales que hay que debatir, pero no debemos aislarnos de los asuntos tradicionales como el desarrollo de las personalidades y los grandes hombres panameños.

¿Cuál ha sido la mejor época de Lotería?

Yo la dividí en ocho épocas. En la primera época no surge como un medio de difusión de la cultura; el primer número señala en su editorial que es un medio para difundir toda la información sobre la institución. Es a partir de 1942-1943, cuando aparece el historiador Juan Antonio Susto, quien le empieza a dar la orientación cultural, y Guillermo Batalla, que era uno de los editores, hace un llamado a un grupo de intelectuales para que se incorporen al proyecto de cambiar la revista hacia una de carácter cultural. En una segunda fase, que empieza en 1944, es cuando empieza a ser una revista de carácter cultural. Hay una tercera época (1949 a 1954) en la que, según mi análisis del contenido, considero que hubo un bajón en función de lo intelectual y del aporte de estos y lo que se hace en esa época es reemplazar artículos de autores panameños por los de extranjeros, pero que no tienen contenido cultural, ni siquiera del extranjero.

Esa se puede calificar como una época controvertida, pero ¿cuál ha sido la mejor?

La primera época y también la cuarta, que es de 1955 hasta la actualidad. La década del 70 fue muy productiva, en la que se trató de seguir la línea de los aportes culturales.

¿Algún ejemplo de aportes concretos de Lotería que sustenten su ese punto de vista?

Pensadores como José Daniel Crespo, Guillermo Andreve, José Dolores Moscote, Rodrigo Miró, que fueron intelectuales que escribieron, pero con base en la realidad cultural panameña. Por ejemplo, Rodrigo Miró retoma el estudio de los poetas, de los literatos, de aquellas personas que se vinculan a la literatura, y hace un análisis que lo lleva a decir que sí hay una literatura panameña y que sí hay escritores panameños, que es algo sobre lo que siempre se ha dudado. En cuanto a la Historia están Castillero, Juan Antonio Susto y Guillermo Andreve. La producción de ellos se circunscribió, en principio, a retomar todos aquellos personajes que habían actuado en la vida nacional desde la colonia (1501 hasta la época republicana).

Ve la nueva generación a Lotería igual como la apreciaron los intelectuales que menciona?

Sí.

¿Seguro?

Definitivamente que sí. Incluso, Justo Arroyo, que fue editor de la revista; Rogelio Sinán, Enrique Jaramillo Levi, Mario Augusto Rodríguez (q.e.p.d), además de Berta Alicia Peralta y Roberto Núñez Escobar, que se vincularon al plano periodismo, pero también en la literatura emplearon sus experiencias como periodistas y la integraron al marco de la literatura.

¿Hasta qué punto se puede decir que el panameño está identificado con lo que representa Lotería? ¿Es una revista para intelectuales o para todo el mundo?

Definitivamente que sí hay una identificación. Es una pregunta que yo siempre debatí. Primero, la revista Lotería no puede ser con un nivel de investigación profunda, lo cual no implica que las investigaciones que se presenten no tengan importancia y actualidad. Nosotros no podemos reproducir en la revista un artículo complejo sobre cardiología o sobre medicina en general, lo que hacemos es reproducir artículos sobre medicina, sobre la actividad hospitalaria o sobre el combate de la fiebre amarilla en la época de la construcción del Canal. Entonces, Lotería está en la posición de que no es una revista para intelectuales, por eso el lenguaje no puede ser para intelectuales, tiene que ser de intelectuales y también tiene que cubrir una masa de la sociedad panameña bastante amplia. Tiene que llegar a los estudiantes de todos los niveles, al interior, al hombre del campo, y muchos de los trabajos que se producen ahí tienen un lenguaje accesible y la redacción es comprensible para cualquier persona, incluso aquellas que no hayan realizado ni siquiera estudios de primaria.