LA VERDAD DEL BRONCEADO
El fin de semana pasado decidí visitar una de mis playas favoritas del Pacífico. Típico de esta época, el lugar estaba colmado de personas, y el regreso a casa se hizo tedioso, lento por el tranque, pero más allá de aquello, hubo un factor denominador común que me llamó la atención: la cantidad de mujeres y hombres bronceándose en la playa sin límites de horario, y a veces, hasta sin entendimiento acerca de lo que realmente ocurre en la piel cuando la exponemos al sol de esa manera.
LA VERDAD DEL BRONCEADO
El fin de semana pasado decidí visitar una de mis playas favoritas del Pacífico. Típico de esta época, el lugar estaba colmado de personas, y el regreso a casa se hizo tedioso, lento por el tranque, pero más allá de aquello, hubo un factor denominador común que me llamó la atención: la cantidad de mujeres y hombres bronceándose en la playa sin límites de horario, y a veces, hasta sin entendimiento acerca de lo que realmente ocurre en la piel cuando la exponemos al sol de esa manera.
Quizás eres una persona que disfruta en gran manera de la playa. Y es que, ¿quién no quiere pasar unos increíbles días admirando el paisaje? El problema está en que, cuando planeamos nuestros descansos, no tomamos las medidas adecuadas. Así lo expone uno de los lemas del Instituto Oncológico de Panamá: "Las vacaciones de tu vida pueden acabar con ella".
Protegerse del sol es una responsabilidad de cada uno de nosotros, esa es la única forma que tenemos para evitar un cáncer de piel el día de mañana.
El cáncer de piel ocupa el segundo lugar de incidencia en Panamá, según cifras proporcionadas por el Instituto Oncológico Nacional. Y es que actualmente -en nuestro país- se detectan 10 casos de cáncer de piel por semana.
El tipo de cáncer con más frecuencia en los seres humanos es el carcinoma de células basales.
Según la Sociedad Americana de Cáncer, ocho de cada diez casos presentan este cuadro. Por lo general, se presenta en zonas corporales de mayor exposición al sol, como la cabeza y el cuello. Generalmente solía verse en personas de mediana y avanzada edad, pero hoy casos de personas jóvenes también. Esto se debe a la exposición solar que hayan tenido.
El otro es el carcinoma de células escamosas. Únicamente dos de cada diez casos lo presentan. A diferencia del cáncer de células basales, este tipo puede llegar a penetrar mayores capas de la piel y pueden surgir cicatrices o llagas crónicas en la piel. Si no son tratados a tiempo, tienen la particularidad de propagarse y de llegar a causar la muerte.
Por último, existen también los melanomas. Pueden surgir en cualquier parte del cuerpo. En los hombres es más común que aparezcan en el torso (pecho y espalda), y en las mujeres en las piernas. Al igual que el cáncer queratinocitos, este puede surgir en el rostro y el cuello. El melanoma no es un tipo de cáncer tan común, pero es mucho más peligroso. Sin embargo, es curable en sus etapas iniciales.
El riesgo de no tratarlo justo a tiempo reside en que este tiene la capacidad de expandirse muy rápidamente a otros lugares del cuerpo humano. ¡No es un juego!
Medidas de prevención para las horas de solCuando estamos expuestos al sol recibimos radiación ultravioleta. La misma incluye los rayos A (UVA) y los B (UVB).
Los rayos UVA representan hasta el 95 por ciento de la radiación ultravioleta que alcanza la superficie de la tierra; a pesar de que son menos intensos, tienen la capacidad de penetrar las capas más profundas conocidas como la epidermis, activando la producción de melanina y provocando el bronceado.
Los UVB son responsables de enrojecimiento y quemaduras. Estos provocan daños que pueden causarte una lesión en el ADN de la piel, provocando mutaciones que pueden desarrollar cáncer de piel.
Antes y durante la exposición solar te sugerimos seguir estas instrucciones:
1. Evita el uso de productos o cosméticos que contengan alcohol o perfume.
2. Elige el protector solar adecuado. Procura siempre usar uno de SFP 15 o más. Puedes usar bronceadores encima, pero con protección solar.
3. Aplica el protector 30 minutos antes de exponerte al sol. Esto asegurará que tu piel haya absorbido el producto de buena manera.
4. Horarios prohibidos: se recomienda que desde las 11:00 a.m. hasta las 3:00 p.m. no salir al sol, ni exponerse largos ratos.
5. Factores ambientales. El agua y la arena producen un efecto amplificador de los rayos solares, por lo tanto, debes procurar tu protección aún cuando haya sombra.
6. Ingiere líquidos. Para compensar la pérdida que tuvo el cuerpo al exponerse al sol, es bueno que recuperes el líquido.