Guerra: Irvin Halman actuó de manera negligente y dolosa
"Es inevitable no analizar toda esta situación y apreciar que Halman adoptó un comportamiento sospechosamente evasivo y dilatorio", destacó la defensa del empresario.
A través de algunos escritos de objeciones por parte de la defensa del joven empresario panameño, Mayer Mizrachi Matalon, quien fue detenido el pasado 30 de diciembre del 2015 en Colombia por la supuesta comisión de delitos contra la administración pública, deja claro que el actual administrador de la Autoridad Nacional para la Innovación Gubernamental (AIG), Irvin A. Halman, actuó de manera negligente, dolosa, de mala fe, e hicieron caso omiso a todos sus intentos por establecer una comunicación efectiva entre ambas partes afirmó el abogado Silvio Guerra.
A la defensa de Mizrachi, le llama fuertemente la atención la mala fe por parte de Halman, quien no propició las bases necesarias, las condiciones, ni estableció los supuestos requeridos para que INNOVATIVE VENTURE, S.A., (empresa de su defendido) instalara la red a las demás entidades.
"Es inevitable no analizar toda esta situación y apreciar que Halman adoptó un comportamiento sospechosamente evasivo y dilatorio, lo cual nos lleva a concluir que la denuncia, y posterior querella interpuesta, fue premeditada de manera malévola, dolosa y perversa", destacó la defensa del empresario.
Se explica en este escrito que si en algún momento se dio un mal manejo del contrato, como asevera la fiscalía, habrá de quedar claro y categóricamente establecido, que no fue por indiferencia o abandono por parte de Mizrachi, sino por la desorganización y mala fe de los funcionarios de la AIG hacia el producto CRIPTEXT, y que prueba relevante de ello es la actuación negligente y de mala fe del propio querellante, Halman.
En cuanto a la empresa y las acusaciones por parte de la fiscal, la defensa detalló al juez, que la fiscal, en no pocas oportunidades, ha hecho referencia a que INNOVATIVE VENTURE, S.A., es una sociedad inscrita en territorio estadounidense, que no tenía ninguna base dentro del territorio panameño, haciendo ver que toda la compañía era una invención aparecida e improvisada para cumplir con fines únicamente delictivos; sin embargo, estas aseveraciones las cuestionan los abogados, aclarando que son totalmente insostenibles ya que, como consta en el expediente, la sociedad de su defendido está constituida en suelo panameño y bajo nuestra legislación.
"No es requisito que dichos programas estén patentados dentro del territorio panameño para que puedan, entonces, tener la validez o legitimidad necesaria para contratar con el Estado o la República de Panamá, basta, solamente, conque la sociedad esté debidamente registrada dentro de nuestro territorio. Cosa que efectivamente existe y se dio, mucho antes de que se le contratara por parte de la AIG", explica el escrito.
Sobre el cobro de la empresa INNOVATIVE VENTURE, S.A., a la AIG, puntualizan que Mizrachi estaba en todo su derecho al recibir el dinero por el producto del cual hizo previa entrega, el cual incluía 100 licencias una por cada usuario, para los cuales se crearía una red, en la que se integraría a los siguientes estamentos de seguridad: Policía Nacional (PN), Ministerio Público (MP), Ministerio de Seguridad (Minseg) y Ministerio de la Presidencia.