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Encuentran la pirámide perdida del Valle de Giza
Aleida Samaniego - Publicado:
Ú nica maravilla del mundo antiguo que aún se conserva, la pirámide de Keops es una construcción, cuya inmensidad sólo puede ser comprendida en una visita presencial: inmensa por su tamaño, grande por su historia, admirable por el proyecto arquitectónico que le dio vida.En pocas palabras, es una inmensidad sin límites.La pirámide de mayor dimensión de todo el mundo, Keops, fue el edificio más alto hasta el siglo XIX, cuando se construyó el primer rascacielos moderno.Tiene una altura de 146 metros, lo que la convirtió en una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo, fue su constitución: cada una de las piedras usadas para construirla pesa más de dos toneladas.Más de dos millones de esas piedras fueron necesarias para conformar la pirámide.Originalmente, sus lados estaban recubiertos por bloques de piedra caliza pulidos, pero el recubrimiento se desprendió debido a un terremoto, a principios del siglo XIV.El Faraón Keops perteneció a la Cuarta Dinastía, alrededor del año 2.560 a.C., lo que da como resultado que la pirámide data de hace 4500 años aproximadamente.Se cree que fue construida, según las costumbres egipcias, para albergar los restos del faraón una vez que éste iniciara su viaje a la nueva vida.Interioridades.En su interior, la pirámide alberga dos cámaras: la Cámara del Rey y la Cámara de la Reina.Ambas son plantas rectangulares de losas de granito y paredes y techos lisos, sin decoración.En el subsuelo, se encuentra la Cámara del Caos.A ellas tres y a la Gran Galería se accedía por un pasaje descendente que las comunicaba.Otra pirámide.No obstante, un grupo de investigadores ha presentado información que señala que hubo una pirámide más grande que la Keops y es la pirámide de Dyedefra, la cual alcanzó 153 metros de altura (7,52 metros más que la Keops).El faraón Dyedefra, que reinó en Egipto hacia el año 2.556 antes de Cristo, hace casi cinco milenios, construyó la pirámide con más altura y magnificencia de las cuatro que se veían desde las orillas del Nilo.Un grupo de arqueólogos ha descubierto que las ruinas que hoy pueden verse en Abu Rawash, a pocos kilómetros de El Cairo, corresponden a la llamada pirámide perdida, cuyas piedras han acabado con muchas de las leyendas que han rodeado el reinado del que fuera el heredero de Keops.La más alta.«Esta pirámide fue la más alta de todas las del complejo de Giza [Keops, Kefrén y Micerinos] y su piedra era de mejor calidad.Durante años se pensó que no había sido terminada de construir, pero hemos comprobado que no fue así.Sus piedras fueron utilizadas durante siglos para construir en El Cairo», señaló Zahi Hawass, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades egipcio.«Durante los 12 últimos, años hemos excavado allí y hemos sacado a la luz gran parte de la historia de la IV dinastía, las luchas por el poder y parte del misterio de la construcción de las pirámides», añadía en la presentación internacional del documental 'La pirámide perdida'.Los restos de la pirámide del enigmático Dyedefra no levantan hoy más de 10 metros del suelo.Están en una colina de Abu Rawash, una zona militarizada de acceso restringido.Alrededor el reseco desierto y al fondo, impresiona la negra nube de contaminación de El Cairo.Entre la neblina también se adivinan las siluetas de las otras tres pirámides de Giza, con las que esta majestuosa obra nunca estuvo conectada, según los arqueólogos.Hawass cree que el hijo de Keops eligió este lugar a cierta distancia de Giza, el cementerio de su dinastía, porque quería ser independiente de su familia y su alto enclave pondría su tumba más cerca del Sol, su dios.Fue levantada con caliza y granito rojo de Asuán, como la de su padre.El material llegaba desde 800 kilómetros de distancia por el Nilo y alcanzó Abu Rawash, a través de grandes canalones.Allí, utilizando una dura piedra de dolerita, se partían los bloques, a los que daban la forma precisa con una especie de sierra de cobre con el filo de cuarzo.Cada una de las piezas pesaba hasta 25 toneladas y se necesitaban hasta 370 personas para moverla.La mayoría de los trabajadores que llegaron a Abu Rawash, unos 15,000 en los ocho años que duró la construcción, fueron agricultores que realizaban este trabajo cuando las crecidas del Nilo inundaba sus tierras de cultivo.