Extranjera detenida por amenaza de bomba será deportada por Migración
La mujer de nacionalidad colombiana que fue detenida por las autoridades en el supermercado Rey de la 12 de Octubre podría ser deportada a su país de origen
La mujer de nacionalidad colombiana que fue detenida por las autoridades en el supermercado Rey de la 12 de Octubre podría ser deportada a su país de origen por la comisión de una de las modalidades de terrorismo.
Esto lo establece la Ley 62 de 17 de septiembre de 2013, mediante la cual se adicionaron nuevas disposiciones al Código Penal, con las que se aplican sanciones de seis meses a un año de prisión para quienes sean responsables de efectuar una amenaza de bomba.
La norma destaca en el artículo 295 que en el caso de ser ciudadanos extranjeros, deben ser deportados a su país de origen.
Una fuente allegada al proceso reveló que en este hecho en particular, el caso fue resuelto en otra esfera, la cual podría ser de corregiduría, al tomar en cuenta que se trata de sanciones que van de seis meses a un año de prisión, una pena mínima que según la ley puede ser reemplazada con multa o trabajo comunitario.
Sin embargo, la misma legislación expresa que una vez cumpla la pena, el infractor debe ser remitido al Servicio Nacional de Migración para su inmediata deportación.
La mujer permaneció por espacio de cuatro horas en uno de los baños del supermercado y advertía a los clientes que se acercaban que tenía una bomba.
Luego de las negociaciones entre los bomberos y oficiales de la Policía Nacional, lograron sacarla del lugar y se descubrió que tenía una biblia en su poder.
La cadena de supermercados Rey no ha contabilizado las pérdidas económicas que ocasionó este hecho, que no pasó desapercibido, pero se conoció que los directivos de la empresa se reunieron para reforzar la seguridad y evitar que eventos como estos se vuelvan a repetir.
Además de las pérdidas económicas ocasionadas al supermercado, en el lugar se generó el caos, pues se tuvo que desalojar toda la plaza y desviar el tráfico.
Procesos
En el Ministerio Público se investigan tres casos de terrorismo que ya están en etapa sumarial, pero hasta el momento no se ha determinado quiénes son los presuntos responsables.
La razón es que estos actos se cometen entre las sombras del anonimato y pese a las herramientas tecnológicas con que cuentan los aparatos de seguridad para localizar llamadas telefónicas, es muy difícil ubicarlas, porque estas se realizan desde teléfonos públicos o celulares prepago de tipo minitarjetas o chips.