Edad, elegancia y lozanía

Sonia Ortíz, a sus 61 años tiene la frescura de una rosa que se abre con el rocío mañanero para saludar al día.

Aunque parezca poético, así es esta dama, cuya actitud hacia la vida, es parte del secreto que la mantiene lozana.

En la Semana de los Adultos Mayores, queremos hacer hincapié en la importancia de vivir cada año lo mejor posible, para poder desarrollarse de manera integral.

¿Cómo te sientes contigo? ¿Te quieres? ¿Tienes la autoestima alta? ¿Te perdonas? ¿Eres optimista? ¿Te preocupas demasiado? ¿Eres sedentaria?Para esta ejecutiva, docente, madre de familia y esposa, verse bien, mantenerse saludable, no perder la calma, son importantes.

Se levanta muy temprano, come sanamente, evita los excesos, trata de ver la parte positiva de todo (lo que le ocurre y lo que sucede alrededor), es muy jovial, porque sonreír es una de las pocas cosas gratis y siempre abre puertas, alegra la vida de otro y permite refrescarse interiormente.

Chiricana, criada en Colón, Sonia Ortíz, con todo y que la vida la golpeó donde más duele (perdió a un hijo de 11 años), no dejó que el dolor le impidiera gozar del encanto de cada instante.

Lo principal es que la persona no piense en la edad, sino en el momento y trate de vivirlo a plenitud de manera sana, opina.

" Soy muy femenina, pienso que también muy vanidosa y me gusta verme bien.

Trato de vestirme a la moda, pero cuidando mi femineidad, jamás me he puesto un jean porque siento que no es femenino.

Mi mamá nos enseñó que hay que cuidarse y arreglarse.

Desde los 20 años nos poníamos crema en la cara.

Llevo una vida sana, no soy una mujer de vicios, soy muy activa, como sanamente, camino tres veces a la semana 28 cuadras, me acuesto temprano y jamás en la vida me han puesto un bisturí encima.

Aunque, creo que genéticamente también soy privilegida, pues mi madre tiene 80 años y parece de 70", comentó Sonia.

Su trabajo como directora del Instituto de Idiomas del Consejo del Sector Privado para la Asistencia Educacional, CoSPAE, le exige buena presencia y muy buenas relaciones humanas y ambas cosas son posibles sólo si se siente bien y lo proyecta.

Y todo lo anterior, más tener una vida espiritual rica, incide en el aspecto físico, mental y emocional.

"Tu vida interior, tu estado de ánimo, se te reflejan en la cara.

Yo he visto muchachas que parecen viejas.

Descuidan su apariencia, que no tiene que ver con la edad, ni con la ´belleza´física, es asunto de actitud, de cómo ves la vida".

Autoestima y apariencia personal están ligados.

Igual, el ejercicio, la salud y el estado de ánimo, los cuales, al igual que la autoestima, inciden en la imagen que proyecta una persona.

El rostro, principalmente los ojos, hablan mucho de una persona, son el reflejo del alma.

La calidad de su sueño afecta su apariencia, para bien o para mal.

Mirar a la vida con sus mejores ojos ayuda mucho, pues, ser quejumbroso, darle rienda suelta a las preocupaciones y al mal carácter marchitan.

El ejercicio y la buena dieta han probado que son herramientas fabulosas para la salud corporal y la apariencia.

Para verse y sentirse bien, sea optimista.