Una noche de música y buena letra

A compañado por una excelente orquesta, tres coristas, cuatro bailarinas y más de 2 mil quinientas personas entre el público, el cantautor mexicano Marco Antonio Solís salió airoso de su primera presentación en Panamá, la noche del martes, en el Teatro Anayansi del Centro de Convenciones ATLAPA.

La lluvia en horas de la tarde y una leve llovizna en la noche, no fueron obstáculo para que los seguidores del intérprete, conocido desde los pasados 80 con el grupo Los Bukis y a partir de 1996 como solista, llegaran a este esperando evento prolongado por muchos años.

La apertura, con una descarga de ejecuciones instrumentales, entre farra y sinfónica, mientras aparecía en la pantalla al fondo del escenario diversas escenas de vídeos, conciertos y recorridos del artista, insinuaba una noche especial con un poco de todo; y así fue.

El público empezó a aplaudir y gritar desde que la Orquesta de Cuerdas de Panamá y los músicos de Marco ejecutaron las notas de "Tu Cárcel" y la ovación llegó cuando el cantante apareció en el escenario y con evidente emoción hizo reverencias de agradecimiento, para luego tomar su guitarra y hacer lo que asegura más le gusta en la vida; cantar.

Bajó el tono para interpretar "Mi eterno amor secreto", donde prevalecieron los violines y el teclado.

Luego de estos dos temas dijo: "hermanitos de Panamá, gracias por esta bienvenida y a Dios por tener salud y darme la oportunidad de estar aquí.

Queríamos venir hace años".

Seguido, "El Buki Mayor", como también se le conoce, alternó sus más sonados éxitos con Los Bukis y los de sus producciones como solista.

Al presentar algunos temas hizo espacio para hablar del amor a Dios, del perdón, del enamoramiento y de los sentimientos sinceros que enaltecen.

Por ejemplo, antes de cantar "Sigue sin mí", señaló que "los sentimientos más difíciles de aplicar son el amor y el perdón y cuestan demasiado".

A este punto, para sorpresa de la audiencia, se puso a cargo de la percusión para según él subir los ánimos con una cumbia mexicana, lo cual repitió en varias ocasiones en el transcurso de la noche.

Aparte de las buenas letras y la interpretación, en este concierto hay que destacar la sincronización y maestría ejecutoria de los músicos, una orquesta fascinante, con finos solos de viento, cuerdas y teclados, que merecieron aplausos por separado en varias ocasiones.

Al terminar "si te pudiera mentir", que escribió hace años para Rocío Jurado, quiso saber quiénes en la audiencia pasaban de 30 años, para no sentirse solo al cantar de Los Bukis "Te sigo esperando" y después dedicó a los de más de 40 años el tema "Dónde estará mi primavera", en la que la Orquesta de Cuerdas se lució.

A los solteros y solteras dedicó "Cuando te acuerdes de mí", instándolos a que, "para que llegue el amor hay que tener abierto el corazón y la disposición, lo cual dio paso a "Necesito una compañera", su primer éxito conocido acá en 1984, con el que dejó al público en los coros, acompañados por las trompetas y los trombones.

Del venezolano Alí Primera (quien fuera padre de los hermanos Servando y Florentino), cantó "Casas de Cartón".

Ya a la mitad de la velada, desabrochó su saco y bajó al público para interpretar la melodiosa letra de "Inventaría", primero en medio de dos damas y luego frente a una joven a la que terminó besando en la mejilla.

El público, que hasta entonces se ponía de pie para aplaudir terminadas las canciones, lo ovacionó y terminó así, a través de "Tu amor o tu desprecio"; deliró cuando complació con "Navidad sin tí".

Acompañado de un maricahi cantó "En mi viejo San Juan", bajando al público donde las damas lo llenaron de besos.

Entre canciones viejas y nuevas se acercó al final, exhortando a que "por ningún motivo se pierda la fe en nuestro magnífico Creador y sepan que detrás de esta cabellera y barba sólo hay un corazón que les ama".

Marco Antonio desapareció del escenario, pero sus seguidores se negaron a dejarlo marchar y gritaron "otra, otra.

.

.

", hasta que salió para interpretar "Presiento que voy a llorar por tí", "Este adiós" y se despidió, pero volvieron los gritos de"otra, otra.

.

.

".

Marco salió de nuevo y junto a las voces del público cerró con "Si no te hubieras ido".