Willie Colón y Olga Tañón

A pesar de su estado, brindó al público un par de pasitos deslumbrantes; recordando la primera vez que estuvo en Panamá hacia el año de 1969, desplegó salsa por doquier y dando la cara por el talento nacional, prometió seguir cosechando triunfos.

Dirán a qué me refiero, pues a nada más y nada menos que al triple despliegue de artistas, Olga Tañón, Willie Colón e Iván Barrios, quienes se apoderaron del Teatro Anayansi del Centro de Convenciones ATLAPA, en el concierto organizado por la Fundación Ofrece un Hogar, que beneficiará al hogar de niños abandonados y de adolescentes embarazadas, que preside dicha fundación.

Las filas eran largas y a simple vista se percibía el deseo de los fanáticos, de gozar al ritmo de la salsa y el merengue de dos grandes artistas, impulsores de la música caribeña.

Encargado del “opening”, Iván Barrios cautivó los aplausos del público al demostrar que su talento ha sobrepasado fronteras.

Este artista nacional, quien en días anteriores puso en evidencia su talento para interpretar ritmos de la mejorana en un programa de televisión local, interpretó temas como “Llorarás”, “Mi bendición”, “Me he enamorado”, “Hecho de tí”, entre otros.

El espacio para dar pie a la próxima presentación fue propicia para que Ivón de Martinelli, presidenta de la Fundación Ofrece un Hogar, diera la más cordial bienvenida a todo el público colaborador de tan noble causa.

Señoras y señores, con ustedes Willie Colón.

Y así fue, trompeta en mano “el madote” se apoderó del escenario para brindar, como había prometido, un popurrí de sus más reconocidos éxitos, “Che Che Cole”, “Barunto en mi corazón”, “Te conozco bacalao”, “Camina pa´ lante”, entre otros.

El “wapea” no podía dejar de exaltar su eterno agradecimiento por el pueblo panameño y los gratos recuerdos que lo asaltan al recordar sus presentaciones en la 5 de mayo en el año de 1969.

Willie continuó con su despliegue de salsa al interpretar canciones como “Idilio”, “Gitana”, “¡Oh qué será!”, y no podía faltar un popurrí de temas del legendario Héctor Lavoe, con el reconocido tema de “Periódico de ayer”.

“Debemos dar paso a la “Mujer de Fuego”, Olga Tañón, así que señoras y señores, muchas gracias por su apoyo”.

Lo que parecía una despedida fría, se convirtió en un cierre lleno de sabor, cuando Willie Colón, respondiendo al llamado de ¡otra!, ¡otra!, se presentó nuevamente en el escenario para culminar su presentación al ritmo de “Esta es la murga de Panamá.

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La noche se puso caliente, y no precisamente por el ambiente, sino porque la tan esperada “Mujer de Fuego”, se apoderó de la tarima, para al ritmo de “Así es la vida.

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, como cambia un día la suerte, di mi vida por tenerte y hoy tu quieres regresar.

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” poner a bailar, gritar y divertir con sus comentarios a todos sus fanáticos.

“Les prometo que voy a intentar bailar; no se preocupen, son cuatro meses pero mi garganta no está embarazada” comentó chistosamente Olga, mientras daba la más cordial bienvenida a todo el público que se había dado cita a tan exclusiva presentación de dos grandes de la música caribeña.

La “mujer de fuego” cantó de todo un poco.

Desde temas para las personas enamoradas y desesperadas como “Por tu amor”, otros para recordar a esa persona especial como “Cuando tu no estas”, corte de su más reciente producción discográfica, y por que no otros del recuerdo, como “Es mentiroso ese hombre, es mentiroso.

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Su condición de mujer embarazada no le impidió dejar a un lado sus rítmicos movimientos, pues aunque fueron en una escala menor a la acostumbrada, Olga acompañó paso a paso a su cuerpo de baile.

Se imaginan el sonido de “Mamita me va a matar, con sus malos pensamientos.

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”, sí, ese tema escrito por Willie Colón e interpretado por Héctor Lavoe, en la voz de Olga.

Pues ese fue el tema que la merenguera dedicó a toda la gente salsera de Panamá, mientras en la pantalla se proyectaban imágenes imborrables de Héctor Lavoe.

“Me voy hacer una “liposucción” después de esto, que ya verán; yo también me voy a amarrar”, dijo la artista segundos antes de entrar de lleno al romanticismo con el tema “Mi eterno amor secreto” de Marco Antonio Solís, el cual fue intercalado por el movido merengue de “Muchacho malo”.

Hay que confesar que muchos quedaron extrañados al ver que Olga no había regalado sus zapatos, como lo hace en cada presentación en Panamá.

Pero el momento esperado llegó, Olga regaló sus zapatos, pero esta vez fueron subastados para beneficio de la fundación.

“Es para mí un placer ayudar a todos los necesitados; yo también tengo una hija que sufre de Síndrome de Sebastián (falta de plaquetas en el cuerpo) y tengo también por quién pedir, sólo les pido que sigan ayudando a todos los niños necesitados”.

Olga se despidió de todo su público panameño con estas palabras y al son de “.

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Y basta ya, de tu inconsciencia y de esta forma tan absurda.

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en el teatro Chino de Grauman en Hollywood, California.