Panamá
Familias están en albergue de Barú y centros de acopio en el interior siguen recibiendo ayuda
- Redacción/provincias.pa@epasa.com/@panamaamerica
El Centro de Acopio de Penonomé en la provincia de Coclé, ubicado en la sede de la Gobernación de Penonomé, continúa recibiendo ayuda en donaciones.
La ayuda humanitaria en alimentos, agua, medicamentos y colchones, llegarde todas partes del país. Foto: Thays Domínguez.
A causa de las intensas lluvias caídas en la provincia de Chiriquí y la comarca Ngäbe-Buglé, unas 95 personas se encuentran refugiadas en el albergue de Barú.
La mayoría de estos afectados llegaron procedentes del sector de Majagual, donde son atendidos por miembros de estamentos de seguridad del área.
Por otro lado, al menos unas 24 viviendas fueron afectadas por las fuertes lluvias en Boquete, Gualaca ay Barú, registrándose también daños en algunos puentes colgantes de la zona, así como la caída de árboles, deslizamientos de tierra en Boquete, Gualaca y Renacimiento.
Ante las condiciones climáticas en la región, también 34 daminificados fueron albergados en la Escuela Nueva Esperanza.
En tanto, el Centro de Acopio de Penonomé en la provincia de Coclé, ubicado en la sede de la Gobernación de Penonomé, continúa recibiendo ayuda en donaciones para los damnificados y ser distribuidas a las regiones del país afectadas por las lluvias.
El gobernador de Penomé, Irving González, declaró que se mantiene la suspensión de las festividades patrias en la región, mientras esté vigente la alerta roja emitida por el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc).
El Centro de Acopio en Penonomé atiende de ocho de la mañana a ocho de la noche, recibiendo alimentos secos, agu embotellada, productos de limpieza, higiene personal, vestimentas, así como colchones y frazadas.
La ayuda humanitaria, en forma de alimentos, agua, medicamentos y colchones, ha comenzado a llegar de todas partes del país, al distrito de Tonosí, enla provincia de Los Santos.
En esa región, más de mil habitantes han sido damnificados, tras inundaciones que han dejado varias comunidades con pérdidas materiales y desplazamientos.
La ayuda es distribuida por voluntarios, fundaciones, sociedad civil y autoridades; igualmente la llegada de ayuda humanitaria a centros de acopio, como el ubicado en la Policía Nacional de Herrera, sigue en marcha para garantizar la distribución de recursos a las comunidades afectadas.
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