Panamá
Decreto de la Alcaldía de Arraiján atenta contra el bienestar animal
- Vivian Jiménez
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Residentes afirman que reprimir a los animales es una forma de maltrato y propicia el abandono de mascotas.
La nueva administración del distrito de Arraiján a cargo de Stefany Peñalba no ha pasado desapercibida, ya que, constantemente, está envuelta en múltiples polémicas, situación que han ocasionado que los residentes del sector soliciten su revocatoria.
Esta semana volvió a ser tema de conversación debido a la publicación en Gaceta Oficial del Decreto No. 8 del 20 de agosto de 2024 que enumera una serie de faltas administrativas que empezarán a regir en el distrito.
Del listado de 101 infracciones emitido por la Alcaldía, las que más llamaron la atención de la población fueron las relacionadas con los animales.
Según la normativa, serán sancionados todos los dueños cuyos animales hagan ruido en horario de 6:00 p.m. a 7:00 a.m.
Dicha infracción conllevará una multa de $100 dólares.
Además, se castigará la alimentación de aves y demás animales en áreas públicas, sin el uso de recipientes adecuados para ello, y sin previa autorización del Municipio.
Disposiciones que han sido muy criticadas por toda la ciudadanía, no solo los habitantes de Arraiján, pues consideran que el ladrido de los perros es algo que los dueños no pueden controlar.
Muchos se han tomado las redes sociales para manifestar su descontento ante dicha reglamentación afirmando que, la alcaldesa quiere castigar acciones que ella misma realizaba durante el periodo de campaña electoral, ya que, en sus redes sociales se pueden observar imágenes donde los animales de calle eran alimentados rudimentariamente.
Representantes de la Asociación “mascotas sin fronteras” señalaron que es común que los perros ladren cuando llegan sus dueños o van a comer, inclusive lo hacen para avisar de algún peligro o que están siendo maltratados, por lo tanto, solicitan que las leyes alcaldicias se enfoquen en sancionar este delito.
Los ciudadanos consideran que reprimir la naturaleza de los animales es una forma de maltrato y propicia el abandono de mascotas, por tanto, dicho decreto atenta contra el bienestar animal.
Exigen que en lugar de limitar el instinto de las mascotas, se impongan sanciones para aquellas personas que generan ruido excesivo a todas horas del día con sus equipos de sonido.
En los 4 meses que lleva Peñalba a cargo de la institución ha enfrentado denuncias de nepotismo, violencia, maltrato y autoritarismo.
También ha sido acusada de recibir doble salario, uno como alcaldesa, y el otro como asesora legal en la Asamblea Nacional.
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