Causas y síntomas de la tendinitis de pulgar
Cuando se produce un traumatismo, ciertas enfermedades reumáticas o un movimiento repetido que fuerza la articulación y el músculo, se puede provocar tendinitis de pulgar.
Generalmente, la recuperación de la tendinitis de pulgar se prolonga porque los pacientes no guardan reposo. Ilustrativa / Pixabay
Sabía usted que actividades repetitivas que provocan fricción y el uso excesivo e inadecuado del celular y la computadora puede causar tendinitis de pulgar.
La tendinitis de pulgar es una inflamación de los tendones. Puede ser más frecuente en los tendones extensores, produciendo un síndrome de fricción entre el tendón y su corredera, túnel donde entra y se desliza el tendón, explica el director médico del Hospital Paitilla y especialista en ortopedia y traumatología, Ariel Saldaña.
En el caso del pulgar, el tendón que permite el movimiento de la articulación del dedo, como ocurre con el resto de tendones de la mano, es especialmente vulnerable por su falta de protección frente a la que presentan otros tendones del cuerpo, detalla un artículo de Yofisio, Fisioterapia y Osteopatía Ecoguiadas.
Por esta razón, cuando se produce un traumatismo, determinadas enfermedades reumáticas, o un movimiento repetido que fuerza la articulación y el músculo se puede provocar tendinitis de pulgar.
Saldaña indica, vía e-mail, que adicional a las causas mencionadas anteriormente también hay otros factores que hacen que sea más frecuente la inflamación. Por ejemplo, a finales del embarazo y durante los primeros meses de vida del bebé, la madre retiene líquidos, el tendón se hace más grueso y roza con las paredes del túnel. Igual ocurre en la mujer después de la menopausia.
Explica que cuando se presenta la tendinitis de pulgar el síntoma más común es el dolor, puede agravarse con la actividad o puede incluso presentarse durante la noche. Además, puede ir acompañado de pérdida de fuerza y ocasionalmente hormigueos.
Para prevenir este tipo de lesiones Saldaña enumeró tres puntos que deben seguir. Lo primero, es corregir las posturas (ergonomía); segundo, darse descansos de la actividad, no estar más de 30 minutos sin parar y hacer ejercicios con la mano: Abrir y cerrar el puño; y tercero, buscar ayuda.
El tratamiento depende de cual sea el tendón afectado. En términos generales se trata de disminuir la actividad que provoca el dolor, tratar con calor y frío, inmovilizar el pulgar y muñeca, tomar analgésicos y antiinflamatorios, si no es alérgico, e indudablemente ir a una cita con el médico de su preferencia, ortopedia o cirugía de la mano.
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Es primordial que las personas sean conscientes de que sino se trata a tiempo una tendinitis de pulgar se puede agravar.
Saldaña comenta que la complicación consiste en que tiende a hacerse crónico y las medidas que pudieron funcionar al principio, ya no son tan efectivas.
"El dolor también sigue aumentando, al punto que el individuo trata de evitar realizar actividades con esa mano. A medida que se agrava el problema se van haciendo más necesarios tratamientos más invasivos: Infiltración, inyección con corticoides, en el área e inclusive cirugía de liberación del tendón", dice.
A saberGeneralmente, no hacer reposo demora la recuperación, por ello, es necesario descansar la extremidad o la articulación, por lo menos hasta que pueda moverlas sin dolor.
El American College of Rheumatology ofrece algunas sugerencias para convivir con la tendinitis:
- Descanse el tendón dolorido, evite actividades pesadas o cualquier actividad que cause dolor.
- Coloque hielo en el área afectada durante 10 a 15 minutos, una o dos veces al día.
- Evite el uso excesivo de cualquier parte del cuerpo al realizar el mismo movimiento una y otra vez.
- Haga ejercicios de calentamiento a un ritmo relajado antes de realizar una actividad más enérgica.
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