‘La confianza mató al gato’, en el Rommel
Como dice el refrán “La confianza mató al gato”, en el estadio Rommel Fernández. Arrancamos con el mismo esquema que usamos ante...
Aurelio Martínez
Como dice el refrán “La confianza mató al gato”, en el estadio Rommel Fernández.
Arrancamos con el mismo esquema que usamos ante Jamaica, basados en los contragolpes, con un solo atacante, y al final no funcionó.
El técnico Hernán Darío Gómez apostó por mantener el control del partido y demoró los cambios, pese a que ya se notaba el cansancio en varios jugadores. En tres minutos llegaron los ticos para dar las dos estocadas que al final resultaron mortales para nuestra selección.
La reacción fue tardía y “El Bolillo” hizo los cambios con un 0-2 en la bolsa. “Matador” Tejada de inmediato pagó dividendos, anotando el descuento y rematando minutos más tarde, y el arquero tico sacó lo que pudo ser el empate.
Los cambios le dieron un nuevo aire y nos volcamos al ataque, pero los experimentados ticos aprovecharon cada roce para tirarse en el campo y enfriar nuestras incursiones y matar el tiempo.
A donde quiero llegar es que no podemos usar el mismo sistema de juego contra todos los rivales, tenemos que salir a la ofensiva, no guardar respeto por nadie y, además, no se puede dejar para el último tramo nuestra mejor arma que es la velocidad y el ataque en masa.
Nos quedamos con un mal sabor y lo peor es que no podemos perder en casa porque así se esfumará otro de los sueños de llegar a un mundial.
A lo que más le temían los ticos era a la velocidad de Cooper y de “Negrito”, que a la postre hicieron su trabajo, y qué bien si se hubiese complementado con la entrada más temprano de Tejada y de Arroyo, que son muy certeros.
Lamentable que no se pudo conseguir esos tres puntos y los ticos manejaron muy bien los tiempos y, como dije antes, aguantaron para perforar las redes en el momento clave.
Lo positivo dentro de la debacle es que se pueden enmendar errores, pero lo que será imperdonable es perder los dos partidos que nos quedan en el Rommel.
Baloy, Godoy y Cooper, también deben manejar mejor sus temperamentos, de lo contrario podemos pagar caro con amonestaciones. “El Bolillo” tiene con qué lograr pasar al hexagonal. Ojo, no podemos perder más.