Paraguay selló su pasaporte a Sudáfrica y agravó calvario argentino

Paraguay se convirtió hoy con 30 puntos en la segunda selección sudamericana en clasificarse al Mundial de Sudáfrica 2010 tras derrotar por 1-0 a Argentina, que fue relegada al quinto lugar o zona de repesca con su entrenador Diego Maradona con la soga al cuello.

El goleador paraguayo Nelson Haedo fue el verdugo de la albiceleste al marcar en el minuto 27, después de que a su equipo le bastaba un empate para anotarse entre los cuatro clasificados directos, a falta de dos jornadas para el cierre de las eliminatorias sudamericanas.

La formación albirroja siguió a Brasil, que el sábado pasado selló su pasaporte al Mundial tras derrotar como visitante (1-3) a Argentina.

La formación dirigida por Maradona fue estremecida en el partido de hoy, que se disputen el estadio Defensores del Chaco, de Asunción, por dos remates que se estrellaron en los palos.

A los 7 minutos, un envío de Haedo se desvió en el poste derecho luego de un centro de Torres, y a los 23 Santana estrelló su remate en el larguero tras un servicio del jugador del Borussia Dortmund alemán.

Argentina si bien después del primer susto pareció sacudirse y arrastró a Paraguay en su terreno, pero los aportes de Jesús Dátalo por la izquierda y Juan Sebastián Verón por ambos frentes de ataque no alcanzaron para que Sergio Agüero ero ni Lionel Messi gravitaran.

Los delanteros que militan en el fútbol español de la selección albiceleste resultaron intrascendentes, al menos en la primera fracción, a tal punto que Villar sólo fue incomodado en el minuto 33, cuando estiró el cuerpo para desviar un remate de media distancia de Verón.

Después de presionar con más fuerza que orden, los paraguayos comenzaron a ajustar los marcajes en la zona media, en la que Gago y Mascherano tampoco contribuyeron mucho, y arrastraron a su rival con mayor insistencia.

Así, en una jugada menos esperada de los paraguayos, reconocidos por su temible juego aéreo y remate a balón parado, sobrevino el gol de los locales.

Salvador Cabañas regateó en medio de la defensa albiceleste, sirvió a Enrique Vera y éste cede a Haedo, que sometió al guardameta argentino, Sergio Romero, con un remate cruzado.

Hasta ese momento, la defensa argentina y Romero controlaban todos los centros por alto de los guaraníes, mientras que en el otro frente de ataque Messi era neutralizado con una marcación escalonada impuesta por Martino.

Para tratar de revertir el sabor amargo de la derrota (1-3) ante Brasil, Maradona ensayó esta noche cuatro modificaciones, una en cada sector.

Romero por Mariano Andújar, Emiliano Papa por Nicolás Otamendi, Fernando Gago por Maxi Rodríguez y Sergio Kun Agüero en vez del lesionado Carlos Tévez fueron las novedades albicelestes para las estadísticas.

En Paraguay reapareció el suspendido Julio Cáceres, el lateral Aureliano Torres entró por el golpeado Claudio Morel, mientras que en la zona media Martino recurrió a dos cambios tácticos tras el apurado triunfo por 1-0 logrado en casa ante BoliviaEdgar Barreto y Enrique Vera desplazaron a Osvaldo Martínez y Eduardo Ledesma.

La presencia de éstos fue clave, ya que incidió en la obstrucción del armado argentino y en la asistencia a Haedo y Cabañas, quienes se convirtieron en verdaderas pesadillas de la zaga argentina.

Además, la expulsión de La Brujita Verón apenas comenzado el segundo tiempo complicó el suplicio del equipo argentino, que llegó a este partido urgido por un triunfo para aquietar las turbulentas aguas que amenazaban llevarse a Maradona.

La ventaja numérica permitió a Paraguay bajar los decibeles y refrescar el centro del campo con el ingreso de Eduardo Ledesma para aguantar las sacudidas de un rival que a esas alturas ya parecía sin restos para cambiar el rumbo.

Con el pase en el bolsillo, Paraguay deberá visitar después a Venezuela y recibir a Colombia, mientras que Argentina, que suma 22 puntos en el quinto lugar, chocará con Perú, en casa, y se las verá con Uruguay, en Montevideo, en la doble jornada de las eliminatorias prevista para mediados de octubre.