Tenga cuidado a quién le abre la puerta de su casa, podría ser un abusador sexual de menores

Informes alarmantes que provocan sentimientos de odio, tristeza y preocupación. Son actos atroces que han ocurrido este 2022 en Panamá, de hombres a los que le han imputado diferentes cargos por delito sexual, violación carnal, actos libidinosos agravados, pornografía y explotación sexual en perjuicio de menores de edad. 

De acuerdo con los informes presentados del 1 de enero al 21 de marzo de 2022 por el Ministerio Público en su página web, los delitos ocurrieron en los entornos más próximos a los menores de edad: sus hogares, en las casas de sus abuelos y en sus barrios.

Y lo peor es que los actos de violencia sexual hacia los menores de edad fueron cometidos por personas muy cercanas a ellos: padrastros, conocidos, tíos, e incluso, los padres.

Tampoco se puede dejar de mirar con mucha preocupación que, por causa de estas agresiones sexuales, cuatro niñas terminaron embarazadas. 

Precisamente, el primer caso de una niña embarazada este año fue reportado por el Ministerio Público el 15 de enero.

El hecho penal investigado se registró desde el 2017 hasta el 2021 en Boquete, Chiriquí, cuando el agresor se aprovechó de la vulnerabilidad de la menor de edad y cometió el delito en reiteradas ocasiones, lo que provocó que esta quedara embarazada.

Al hombre se le decretó, en una audiencia de solicitudes múltiples, la detención provisional por delito sexual y violación carnal en perjuicio de una menor de edad.

Igualmente, en Chiriquí, una menor de 13 años quedó embarazada al ser abusada por un hombre de 35 años, que está en espera de juicio. 

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En este caso, que se dio en octubre de 2019, el hombre se aprovechó de la cercanía que tenía con la víctima para cometer el delito.

Sin duda, que el caso que encendió las alarmas fue el embarazo de una menor de 8 años, algo inédito en Panamá por la edad de la niña.

Según los reportes, la menor vivía en la casa de una tía, porque su madre biológica no la podía cuidar al presentar situaciones de salud mental. Al final fue el esposo de la tía el que cometió el abuso sexual.

El embarazo de la niña fue detectado a las 24 semanas de gestación.

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El agresor fue detenido preventivamente el 29 de diciembre de 2021 e imputado por el presunto delito de violación sexual agravada, a la espera de juicio.

Hasta el momento, el cuarto abuso sexual reportado, en que una menor quedó embarazada, ocurrió en mayo de 2020 en el distrito de Santa Catalina, Cahuita Arriba, comarca Ngäbe Buglé.

Por este hecho fue condenado, mediante acuerdo de pena, Onésimo Santos Flores, a 13 años de prisión.

Como pena accesoria se le inhabilitó para ejercer oficios o profesión en parques, parvularios, centros escolares, campos o centros deportivos y áreas aledañas, donde regularmente se agrupen personas menores de edad, por el término de 2 años, una vez cumplida la pena principal.

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¡Cuidado!
Más del 75% de los casos de delitos sexuales a menores de edad, que han sido revelados hasta ahora por el Ministerio Público, fueron cometidos por un adulto que no era un familiar, pero sí un conocido.

Detrás de este alto porcentaje aparecen casos en que el padrastro cometió el delito sexual.  

El padrastro es la persona que establece una relación formal con la madre y que debería ser parte importante de la vida de sus hijos. Sin embargo, en las siete denuncias,  esta figura lo que trajo fue desgracia.

La primera a la que hace referencia el Ministerio Público se dio desde el 2017 a diciembre de 2021 en el distrito de La Chorrera, provincia de Panamá Oeste, en perjuicio de una niña de 7 años.

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El hombre de 26 años aprovechaba las horas de la madrugada para realizar actos sexuales, a cambio le compraba a la niña golosinas, le hacía las tareas y le prestaba el celular. Además, le tomaba fotos cuando estaba desnuda.

Actualmente, este individuo se encuentra detenido provisionalmente por la presunta comisión de los delitos de actos libidinosos agravados, violación carnal agravada, pornografía y explotación sexual.

También en Panamá Oeste, específicamente en Capira, un hombre de 34 años abusó de su hijastra menor de edad, el 1 de diciembre de 2021.

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Este ciudadano, quien fue condenado a 144 meses de prisión, abusaba de la niña y la amenazaba con hacerles daño a sus hermanos menores si ella lo denunciaba.

Otro que fue condenado con cárcel por abusar de su hijastra menor de edad fue Agustín Rodríguez Rodríguez.

Este hombre, de 37 años, pasará 192 meses de prisión por el delito de violación agravada y pornografía infantil. 

Los hechos ocurrieron el 13 de junio de 2020, en Antón, provincia de Coclé, donde el sentenciado abusó sexualmente de su hijastra, le tomó fotos desnuda y la guardó en el celular.

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Padres abusadores
En los primeros 80 días del año, el Ministerio Público reportó 2 casos de padres que abusaron de sus propios hijos.

El primer caso se dio en el distrito de Arraiján, Panamá Oeste, donde un hombre de 50 años de edad fue acusado por los delitos de actos libidinosos agravados, violación agravada y corrupción de menores de edad, en daño de sus propios hijos de 7 y 9 años.

Este acto atroz se venía dando desde hace dos años.

En relación con el otro caso, el hombre fue condenado a 13 años de prisión por el delito de violación agravada en perjuicio de su propia hija.

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El sentenciado fue declarado culpable por el Tribunal de Juicio Oral, luego de las audiencias realizadas los días 23 y 24 de febrero de 2022.

Los hechos se dieron desde el mes de enero de 2019, en Tocumen, ciudad de Panamá, donde en reiteradas ocasiones el sentenciado mantuvo acceso carnal con su hija. Para esa fecha la misma era menor de edad.

¿Cómo identificar al abusador sexual?
Ante estos informes aterradores presentados por el Ministerio Público nace obligatoriamente una interrogante: ¿Hay algunas características que puedan ayudar a identificar a un probable agresor sexual?

Para la psicóloga forense Lesbia González esta pregunta es difícil de contestar, porque hay algunos abusadores sexuales que presentan ciertas características, mientras que hay otros que no la muestran.

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"Este grupo que no la presenta es el que más se puede acercar a las víctimas, porque no tienen nada que les sea fácil de identificar. De hecho, son las personas que apreciamos, que consideramos como buena gente, que están en los clubes deportivos, en las escuelas y dentro de la familia", explicó González.

"Lastimosamente, los pedófilos y pederastas han logrado tener un velo que no se pueden identificar tan fácilmente", agregó.

Enfatizó que dentro de los agresores sexuales hay los que están felizmente casados, "que pareciera que su vida familiar es perfecta".

"Estos pueden ser los más grandes depredadores sexuales, porque se ocultan muy bien, tienen una capacidad impresionante para ocultar sus emociones y sentimientos", precisó.

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La psicóloga forense también se refirió a los abusadores sexuales que pudieran ser identificados. 

"Son personas que les gusta, con frecuencia, estar rodeados de menores de edad. Esta es una persona que consume mirar a través del Internet fotografías de menores. También hay algunos que no tienen vínculos emocionales y sexuales con personas que uno le pueda reconocer", explicó.

González reiteró que no es posible poder dar un perfil tan fácil de un abusador sexual de menores, sin embargo, hizo una recomendación a los padres para tratar de mantener siempre protegidos a sus hijos. 

"Hay que estar más pendiente de lo que rodea a nuestros hijos.  ¿Con quién están? ¿Con quién los dejamos? Si es posible, lo más recomendable es no perderlos de vista lo más que se pueda, porque el depredador sexual está en todas partes", expresó.

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Señales de alerta
Según la psicóloga forense, es el niño el que puede dar una señal de alerta.

"El niño abusado sexualmente siempre se retrae. Siempre tiene una conducta de retraerse, se siente triste, se le nota que hay un cambio del niño que tú conoces y que se divierte", aseveró.

"Este niño baja los promedios de la escuela, no quiere estudiar. Se refugia mucho en su cuarto. Está ansioso y nervioso. Incluso, el niño no quiere que lo toquen  y que alguien, como su madre,  mire su cuerpo", añadió. 

De identificar algunas de las señales de alerta, González recomienda inmediatamente buscar ayuda profesional, en este caso médica, psicológica y legal.

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"Hay que ubicar al posible depredador sexual, que podría estar dentro de nuestro hogar, porque puede ser un papá, un tío o hasta la mamá. Al depredador sexual una vez que se le logra identificar, no podrá hacer nada, porque muchas veces cuando lo descubrimos tiene una cantidad de cosas guardadas como fotos y audios. Estas cosas, cuando no tiene a las víctimas, las usa para mantener su emoción sexual", destacó.

Por último, pidió a los padres que estén siempre pendientes de los cambios de actitudes de sus hijos y saber "con quién y dónde están y qué están haciendo la mayor cantidad de veces posible, porque el depredador sexual está por cualquier parte". 

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