Unas pancartas en el estadio pusieron a Maradona a la altura de Mandela y el Che

Pancartas y banderas en las gradas en las gradas del Soccer City de Soweto colocaron al seleccionador argentino, Diego Maradona, a la altura del ex presidente sudafricano Nelson Mandela y del líder revolucionario argentino Ernesto "Che" Guevara.

Uno de los dibujos que se dejó ver al comienzo del partido mostraba la cara sonriente de Maradona y Mandela, mientras que en una bandera argentina situada en unos de los córneres del estadio aparecía la imagen del seleccionador argentino junto a la con el Ché y entre ambas el nombre del Atlético Rafaela.

El estadio Soccer City, el más llamativo de los que acogen el Mundial, sede del partido inaugural y final, recibió a la selección argentina completamente engalanado por los aficionados argentinos y con un aspecto en el que el azul y el blancos se imponían a pesar de la fuerte tonalidad naranja de sus localidades.

Banderas de apoyo, cánticos y un elevado número de seguidores de Argentina dieron ánimo a la selección con el permiso de las vuvuzelas, las únicas capaces e eclipsar con su inefable sonido el apoyo a esta selección.

Muchos de los seguidores argentinos desafiaban el frío que presidió el encuentro (siete grados a la hora del inicio), a pesar de que se disputó en una tarde soleada, con camisetas de manga corta y lo hicieron, sobre todo, a base de no permanecer un solo minuto quietos en las gradas del estadio.

Diego Maradona fue, una vez más, el protagonista de los prolegómenos del partido.

Durante el calentamiento previo estuvo en chándal sobre el césped del estadio, pero para dirigir el encuentro salió con traje de chaqueta y corbata, igual que ocurrió en el partido ante Nigeria del pasado sábado.

Hasta se pudo ver una figura troquelada del seleccionador de la albiceleste portada por uno de los varios miles de seguidores del equipo que hoy se dieron cita en el encuentro.

La selección de Corea del Sur también estuvo en el partido, así como un numeroso grupo de seguidores que desplegaron dos enormes banderas del país en las gradas justo cuando iba a empezar el encuentro.

Sin embargo, algunos de sus seguidores llevaban pelucas azules y blancas que no aclaraban para quien iba a ser su apoyo en el encuentro.

Otros, con la mascota Zakumi pintada en el rostro, sí que dejaban claro con quien iban en el encuentro.

Además, algunos sudafricanos se sumaron a la causa del equipo asiático.

No todo fueron argentinos y coreanos en este encuentro, también hubo lugar para los aficionados locales.

Tras una de la portería, numerosos escolares sudafricanos tuvieron la oportunidad de presenciar el encuentro en directo.

Perfectamente uniformados con los llamativos colores de sus respectivas escuelas, estaban agrupados con sus chaquetas celestes, verdes, rojas, azules o negras que les identificaban perfectamente.

La nota exótica del partido, que tuvo verdadero color mundialista, corrió por cuenta de las banderas de Escocia y Croacia, que también se sumaron a la fiesta.