Surgen nuevos grupos que se dedican a la colección de objetos
Juegos de estrategia militar, memorabilia o construcción de piezas de guerra también están en la mira de los coleccionistas.
Surgen nuevos grupos que se dedican a la colección de objetos
El arte de recopilar no solo se remite a obras de artes, muebles o enseres. A diferencia de lo sofisticado y de los detalles que observan los tres tipos de coleccionistas que se ha presentado en este documento, existen otras personas que también dedican tiempo y dinero a su hobbie. Un valor agregado en este estilo de diversión requiere además un poco de imaginación.
Eso es precisamente lo que impera entre los miembros de Panamá Word Gamer, una organización de coleccionistas de piezas de juegos bélicos de mesa. Mario Athanasiadis, uno de sus socios, afirma que este grupo tiene cinco años de existencia. Su hobbie consiste en comprar piezas de soldaditos hechos de metal y plástico para pintarlos y luego armarlos. Una vez hecha esa tarea, organizan partidas de estrategia “en donde pueden fácilmente desatar un conflicto entre tropas de la Segunda Guerra Mundial contra alienígenas”, afirma Tuñón.
Todas esas piezas son compradas en el extranjero por medio de una tienda virtual panameña que sirve de puente entre las casas comerciales de Estados Unidos, China, Japón o Rusia, por mencionar algunos, con los clientes.
La fuente comentó que además de hacer juegos entre miembros de la agrupación, estas piezas son exhibidas y al final coleccionadas. “Las usamos como piezas de juego, pero casi siempre guardamos un valor sentimental y el resultado es la colección”.
De forma similar actúan los miembros de Modelistas Independientes de Panamá (MIP), un grupo de maquetistas que arman todo tipo de figuras para exhibirlas y coleccionarlas. “Compramos tanques, aviones, carros, portaviones, modelos a escala de edificios, monumentos, plazas, en fin. Esos artículos los compramos afuera. Una vez con los tenemos, los pintamos, los pegamos y los armamos. Las pinturas se compran aparte de los objetos que en su mayoría están hechos a base de plástico y metal suave”, comenta Ricardo Soto del MIP.
Las colecciones son variadas y muy particulares, como la de Luis Tuñón que se considera el único en Panamá recolectando lo que salga al mercado de la famosa saga de ciencia ficción El Señor de los Anillos. En 10 años ha acumulado 110 piezas entre minifiguras, baners, joyas, películas, libros o espadas. Esta afición la comparte en redes con personas de otros países que buscan o venden objetos de esta envergadura.