Marxismo cultural y su influencia en Panamá y el mundo
El Marxismo, busca que todos sean iguales, pero solo en miseria y sumisión; salvo la elite del proletariado que es la única que sabe lo que a la mayoría de la población le conviene saber, y que ellos son los únicos inteligentes que pueden pensar y dirigir a los demás.
Es la estrategia de la izquierda Marxista y de los Marxistas de closet (“Socialistas” y “progresistas”: sus aliados) para crear la impresión de una inventada guerra cultural, existente, es según ellos, en todos los países y en todas las sociedades, donde un grupo de minorías son supuestamente víctimas atacadas por el Capitalismo (enemigo supremo), a través de sus inventadas múltiples manifestaciones: “El Hetero-patriarcado Opresor”, “El explotador Capitalista”, “La Sociedad Burguesa”. La “malvada” y creada por su febril imaginación: sociedad estructuralmente racista, misógina y homofóbica.
El creador de esta estrategia, fue el marxista italiano Antonio Gramsci, a principios del siglo XX, posteriormente durante ese siglo, esta fue desarrollada por la Escuela de Frankfurt (intelectuales marxistas de esa Universidad) en los años treinta y finalmente fue pulida y mercadeada a través del Protocolo de Sao Paulo, (creado por Fidel Castro, Lula Da Silva, etc ) de la década de los 80.
Los Marxistas, desde el libro Das Kapital de Karl Marx, a mediados del siglo XIX, hasta la década de los 20 del siglo XX, solo enfocaron su estrategia de desestructurar = (destruir y volver a construir); y aplicaron sus teorías para crear una supuesta lucha de clases entre los ricos (explotadores) y los pobres (explotados), a nivel económico.
A partir de la década de los 20, ellos expandieron esa supuesta lucha, para apoderarse como tienen por costumbre, de símbolos y de luchas que nunca les habían interesado, pero que son muy populares, para crear los siguientes campos de batallas nuevos:
• La teología de la liberación: una interpretación Marxista de la religión cristiana, donde Cristo, en vez de ser el hijo de Dios, se convirtió en un revolucionario, sacando de contexto versículos bíblicos, para fundamentar esas teorías delirantes.
• El feminismo: los movimientos en pro de conceder el voto a las mujeres y cambiar su estatus jurídico, desde el siglo XIX hasta la década de los 20 del siglo XX; fueron de inspiración liberal, pero a partir de esa época los Marxistas y socialistas (tema que ni Lenin ni Marx desarrollaron en exceso) se infiltraron en esos movimientos, y ese proceso continuó, hasta las décadas de los 60 y 70 del siglo XX, cuando se los tomaron ampliamente.
• La lucha por los derechos homosexuales: los Marxistas y socialistas, nunca tuvieron la menor simpatía por los homosexuales, lesbianas, etc; los comentarios y represiones contra homosexuales y lesbianas; fueron crueles y homicidas, ejemplo: en la Rusia Soviética (Stalin especialmente) como en la dictadura Marxista Cubana (Che Guevara) e inclusive durante la Revolución Cultural en China Comunista, (el propio Mao). A partir de fines de los años 70 del siglo XX, sus aliados, se tomaron este movimiento.
• “El cambio climático, el calentamiento global y otros temas ambientales”: lo mismo que en temas anteriores estos, fueron temas que por décadas fueron ignorados por los Marxistas y a sus aliados, pero a fines de los años 70 y principios de los 80 del siglo XX, también se los tomaron completamente, y su eslogan es que si no se hace todo lo que exigen, urgentemente, viene el apocalipsis climático y fin del mundo, inmediatamente.
VEA TAMBIÉN: Sobre los políticos deformados
Los Marxistas y los Socialistas de closet, no les interesa solucionar los problemas antes mencionados, sino que quieren mantener esos conflictos eternamente, y usarlos para manipular a la opinión mundial, porque la esencia del Marxismo es vivir en conflicto de forma permanente; para distraer de lo inepto e inadecuado de su sistema y de las fantasías y locuras no sostenibles que ellos defienden.
El Marxismo busca que todos sean iguales, pero solo en miseria y sumisión; salvo la elite del proletariado que es la única que sabe lo que a la mayoría de la población le conviene saber, y que ellos son los únicos inteligentes que pueden pensar y dirigir a los demás.
Abogado.
.